Lilypie Third Birthday tickers

Lilypie Third Birthday tickers

domingo, 31 de octubre de 2010

Juegos y diversiones

Carlos y Cristina están en una edad en la que están descubriendo el mundo. Muchas primeras experiencias se acumulan estos meses. Ellos las encuentran a veces divertidas, otras para olvidar cuanto antes, aunque nosotros intentamos que sean las más posibles divertidas.

El caso es que esta entrada se va a centrar en algunos de esos momentos divertidos. Cada vez hacen más tonterías y nos reímos más con ellos, hay que compartirlo con el mundo.

Por ejemplo, el otro día nos invitaron a un cumpleaños de los hijos de unos amigos (no, no es que sean mellizos también, son dos niños de dos matrimonios amigos distintos pero que nacieron casualmente el mismo dia, así que lo celebraban juntos). La celebración tuvo lugar en un sitio de esos de piscina de bolas, y era la primera vez que los peques se encontraban con estas diversiones. Les gustaron, un poco más a Carlos que a Cristina, creo yo, pero es mejor juzgar por uno mismo, así que aquí añado unas cuantas fotos del acontecimiento.

La primera, los dos en la piscina de bolas jugando sin más, en los primeros momentos recién introducidos en las bolas:



Más, de Carlitos un rato después, ya habiendo comprendido la gracia de las bolitas y habiendo pasado ya un buen rato bien divertido:



Otra, de Carlos pillado in fraganti tirando un par de bolas fuera de la piscina. Obsérvese la cara de esfuerzo de tirar las bolas, combinada con la de pillastre que sabe que está haciendo algo que específicamente su papá le ha dicho que no haga.



La siguiente es de Cristina. No se si lo he dicho en alguna ocasión, pero como niña que es le encantan las cosas de princesa y en color rosa (yo no se si esto es cultural o genético, pero esto es así en el 90% de los casos). Pilló por la fiesta la diadema de una niña y la cogió 'prestada'. Iba más feliz que una perdiz, ella, con su diadema por la fiesta.



Otra de Cristina, esta no se muy bien cómo calificarla. ¿Deseos de que el tiempo pase rápido?¿Imitando a mamá? Quiero pensar que es aún un pelín jóven para eso. En fin, admito sugerencias.



Al final se sentaron en la mesa con el resto de los niños a merendar. Claro que ellos no merendaron los bocadillos que se metieron entre pecho y espalda los demás (Carlos y Cris eran de los más pequeños de la fiesta), pero puedo asegurar que pocas veces he visto a un niño de año y medio comer tantos gusanitos, patatas, etc como Cristina esa tarde. Sólo en algunos momentos me recordaba a su primo Pedro. Al final se quedó ahí sentada la última mientras todos los demás niños se habían ido ya a jugar, y seguía comiendo.



Por cierto que Carlos luego iba por ahí repelando los restos de los bocadillos que el resto de los niños se habían dejado. Iba buscando restos de chorizo ¡aguanta tú! como un auténtico Carpanta de la vida.

Otros momentos divertidos, ya alejados de la fiesta que mencionaba antes, tienen lugar cada vez que vamos a Albacete en el salón de los abuelos. No se muy bien de donde ha salido un tubo flexible de esos por donde se pueden meter y salir por el otro lado. Pues bien, Carlitos lo disfruta como pocos otros juegos. Se lo pasa en grande, pasando por dentro, de un lado a otro, por fuera, empujándolo para que ruede, o persiguiendo a su hermana cuando se mete dentro. Se lo pasa en grande. He aquí su culete pasando por el túnel.



Otra de las mayores diversiones de las últimas semanas es que los peques han descubierto a los famosos Cantajuegos. A mi la verdad es que me gustan poco: las dichosas cancioncitas se me meten entre ceja y ceja y no puedo quitármelas de encima. Pero a los nanos (sobre todo a Cristina) les encantan. Para muestra un par de botones, en formato video.





Paciencia. Pero todo lo compensa verles pasárselo tan bien con las cancioncitas. Y es un consuelo saber que aún no tienen edad para pedir llevarles a ver un concierto de esta gente, porque el otro día estuvieron en Valencia, y en Diciembre vuelven... brrr que miedo da esto.

Otro dia seguiremos con más. ¡Ciao!

PD: Ya estaba esto casi redactado cuando este fin de semana ha llegado una nueva incorporación a la familia: la pequeña Zoe, prima de los peques, hija de los titos Jose Ignacio y Ana, ha decidido adelantarse un mes a su llegada prevista. ¡Bienvenida! Ya pondré algo más en la próxima entrada, pero como adelanto, sólo decir que todo ha ido bien excepto que aún no he podido conocerla en persona, por motivos varios.

Además, parece que este fin de semana debe de ser luna llena, porque en paralelo, en Albacete, han venido al mundo Paula y Lua, primas segundas de los peques. ¡Bienvenidas también! A ver si podemos ir a verlas pronto.

Más, en breve

viernes, 15 de octubre de 2010

Zipi y Zape

Ando escaso ultimamente de tiempo; escaso para casi todo, y esto de postear es una de esas cosas que vas dejando para luego porque realmente no es muy importante. Así que se pasan los dias y van pasando cosas y nunca me da tiempo a poner algo aquí.

El signo de los tiempos, supongo.

En fin, dejemonos de lamentos y vayamos al grano. ¿Qué han estado haciendo estas semanas los peques? Bueno, lo principal es terminar de adaptarse a la guardería, cosa no trivial en absoluto. Carlos sigue un poco quejicoso cuando entra, pero luego se lo pasa muy bien y sale hecho un campeón. Da gusto ir a recogerlo, se te echa en brazos corriendo y riendo. Cristina casi nunca llora (bueno, esta semana ha tenido algún día tontito, pero es la excepción), y también sale muy contenta. Están ya aprendiendo cosas: a pintar (si se le puede llamar así), a sentarse cuando toca (Carlitos no hace mucho caso, pero ya llegará), a hacer manualidades (que supongo que en realidad hacen sus 'profesoras')... Cristina está muy colaboradora y Carlos en su linea de ir por libre, pero los dos muy bien. ¡están de mayores ya!

Sigo sin tener fotos ni videos de su estancia en la guarde, pero todo llegará.

Lo que si se está cumpliendo es la máxima de que es entrar en la guardería y empezar los mocos. Tanto es así que esta ultima semana Carlos ha estado incluso con antibióticos, pero los dos han estado pachuchos de tos y mocos. Aqui los tenemos esperando a que su pediatra les atienda:



En otro orden de cosas, hoy he llevado por primera vez a Carlitos a la peluquería. El renacuajo tenía unos pelos pelín largos, no se los habíamos cortado nunca desde que nació y ya a estas alturas parecía ya casi el Camarón de la Isla. Se ha portado como un campeón y ha aguantado (csi) todo el tiempo sentadito y sin moverse mucho. La chica que le cortaba el pelo se sorprendió de lo bien que se portaba. No si ya digo yo que se portan mejor fuera de casa siempre.



Hace un par de semana estuvimos en Albacete, y estuvimos celebrando el bautizo (o casi) del primo Valerio, de quien ya he hablado alguna vez. Si es que el tiempo pasa que es una barbaridad, y este mozalbete ya está mayor mayor. El caso es que nos juntamos ahí hasta el apuntador, incluyendo todos los primos pequeños y mayores, y los primos de Carmen, y sus tíos. Incluyedo por cierto a dos que van a ser papás en las próximas semanas (si a eso añadimos la próxima paternidad del tito Jose Ignacio, los nanos se van a hartar de primos pequeños en muy poquito tiempo). Entre los asistentes estaba el primo Aarón, de quien también he hablado en más de una ocasión. Carlos y Cristina se llevan sólo tres meses con Aarón, por lo que es casi seguro que de mayores van a ser compañeros habituales de pillerías. Hé aquí a Carlos y Aarón ¿son o no son un par de Zipi y Zape?



No tengo mucho más que contar. Nuestros días de diario son de poco contar, y los fines de semana últimos, entre enfermedades de los peques o de sus padres (sí, este fin de semana su mamá está pachucheta) lo cierto es que no hacemos demasiadas cosas que merezcan contarse. esperemos mejorar en próximas entregas

Para acabar voy a poner un video de un anuncio cuyo enlace alguien me envió hace poco y que me gustó. Estoy bastante de acuerdo con el mensaje, la verdad.



¡Hasta otra!

domingo, 3 de octubre de 2010

La guarderia y otros acontecimientos

Ha pasado ya más de un mes desde el fin de lo que contaba en la última entrada. Si es que ya casi ni me acuerdo de las vacaciones, tanto tiempo ha pasado ya. Y no he contado nada de lo que nos ha ido pasando este mes, así que voy a intentar compensarlo un poco.

Lo primero, y lo más importante como novedad en la vida de los peques (y en la nuestra casi que también) es que ¡por fin! han empezado a ir a la guardería. No tengo mucha documentación gráfica que publicar acerca del primer día de 'cole', lo único es esta foto que les hicimos con el movil de momentos antes de dejarles allí solitos:



El primer día no lloraron ninguno de los dos, por lo menos cuando les dejamos allí solitos, más tarde al parecer sí que lloraron un rato. Al salir, los dos echaron una llorera al vernos, pero se les pasó pronto. El dia siguiente es peor, porque ya saben a donde van ("Pero bueno, lo de ayer se va a repetir?", parece que decían), así que lloraron un poquito más. Pero se ha ido adaptando y ahora ya sólo ocasionalmente se escucha algún lloro.

Yo hubiera jurado que quien más fácilmente se iba a adaptar a esta nueva rutina iba a ser Carlos, pero sorpresas te da la vida, la verdad es que Cristina lo lleva mejor que su hermano. Entendámonos, lo llevan muy bien los dos, pero a Cristina la dejas en el suelo y se va ella andando solita hasta su clase, y tan feliz. Carlos en cambio a veces reniega un poco, aunque luego se lo pasa muy bien y sale super feliz al acabar. De hecho, es una gozada ir a recogerlos porque se te tiran encima riendo.

Otra cosa que hemos hecho estos dias es ir al Bioparc. Nos hemos hecho un BonoBerd (es un pase anual) para Carmen y para mi, de modo que podemos ir cualquier dia que estemos aburridos con los peques. Además, como nos pilla cerca de casa, es casi como ir a dar un paseo, nos plantamos allí y vemos los monos o los elefantes o lo que sea, no hace flata dedicarle el dia entero para aprovechar la entrada.

A los nanos les gustó mucho ver a los animales, la verdad es que alucinaban con algunos de ellos. La jirafa, los suricatos o los rinocerontes tuvieron mucho éxito, pero en general se lo pasaron muy bien.





Otra cosa a contar: Carlos y Cristina en la feria de Albacete. Los primeros dias de septiembre tiene lugar la Feria de Albacete, y Carmen estuvo unos días allí con los peques mientras su padre trabajaba en Valencia. Como puede verse en las fotos, los abuelos les vistieron con trajes regionales, a ellos y al resto de primos. A mi la verdad es que esto de los localismos y regionalismos no me hace mucha gracia, qué le voy a hacer, pero bueno, ahí queda el registro gráfico para demostrar que están guapos vestidos de lo que les vistas.





Y ya para acabar, añadiré una foto por la que el tito Álvaro seguramente quiera matarme. Pero es que me hace gracia. Álvaro intentando hacerse unas fotos con sus dos sobrinos, Cristina muy pacífica, pero Carlos un poco nervioso. Auténtico.



Ale, hasta otra (a ver si tardo menos)